La seguridad es una preocupación primordial, más cuando se está decorando la habitación de un niño, pero a medida que tu hijo crece, comenzará necesitando artículos que son un poco peligrosos, y puede ser difícil de distinguir tales artículos. Debido a que utilice la electricidad y tener partes rompibles como lámparas de mesa, naturalmente, son potencialmente peligrosas. Hay varias cualidades que puedes buscar en una lámpara de mesa, según nos explican en www.buokids.com para que tu niño esté seguro y prevenir accidentes y lesiones.
Tamaño
Muchos de los artículos diseñados para los niños, necesitan ser más pequeños que los diseñados para los adultos, y esto incluye a las lamparas infantiles, se deben seleccionar lámparas de mesa pequeñas y fáciles de manejar. La sombra debe ser pequeña, así, como un niño pueda manejarla o que le resulte más difícil utilizar una lámpara con una gran sombra, ya que es más difícil llegar a un interruptor, en el caso de una lámpara diseñada con un interruptor cerca de la bombilla.
Material
Busca lámparas que no se rompan en el caso de caer. Evita el vidrio y las lámparas de cerámica, las lámparas de madera y plástico son buenas. Evita pantallas con componentes metálicos, que pueden calentarse o de tela que se puedan ensuciar. Por lo que al peso de la lámpara se refiere, hay dos cualidades que puedes buscar. Si tu hijo es propenso a los accidentes, puede que quieras algo muy ligero que no dañará en caso de caer. De lo contrario, trata de buscar una lámpara con una base muy sólida, estable y pesada.
Diseño
El diseño de una lámpara o de sus características particulares, es una consideración de seguridad importante. El interruptor debe ser de fácil acceso y de manipular, considera la compra de una lámpara táctil, que es aún más fácil de usar para un niño, ya que sólo tiene que tocar la lámpara para encender y apagar. Si tu hijo es olvidadizo o le gusta dormir con la luz encendida, puedes comprar lámparas que se apaguen automáticamente después de un cierto período de tiempo, lo que ahorra energía y mejora la seguridad.
Bombilla
Aunque la bombilla no es parte inherente de la lámpara, debe ser una consideración importante de seguridad. Muchos tipos de bombillas pueden conseguir calentarse y quemar a tu niño. Por ejemplo, nunca utilices una bombilla halógena para la lámpara de un niño. Una bombilla fluorescente compacta o CFL, puede ser una mala elección, así, ya que estas bombillas contienen mercurio, y al romperse podría ser muy peligroso. Busca lámparas que utilizan bombillas de bajo voltaje, que no conseguirán calentarse tanto como las bombillas normales.
Si estás preocupado porque la luz es demasiado débil, utiliza bombillas más fuertes en la iluminación de techo, o tener más de una lámpara de mesa disponible. El uso de una bombilla LED es otra opción, estas bombillas son caras, pero duran mucho tiempo, y no se calientan.