La identidad corporativa de una compañía no es por siempre, se deben renovar los carteles por: las tendencias son variables, la competencia empuja, el mercado anda veloz, las compañías amplían sus servicios y productos. Si la compañía medra, la imagen con que es vista por sus clientes del servicio y la sociedad debe mudar asimismo, o bien va a estar representando algo que ya no es lógico.
Existen razones, que tienen las compañías pequeñas y medianas, para crear una novedosa identidad corporativa, o bien poner al día la que tienen.
Las razones para actualizar la propia imagen, se pueden reunir en dos categorías:
*Razones estratégicas, planeadas, para aprovechar las ocasiones.
*Reacción a inconvenientes que ya existen.
La empresa es reciente
Es la razón más evidente: una nueva empresa no tiene ninguna imagen establecida con la que llegar a sus clientes del servicio, con lo que debe elaborar una. Se está en un fallo, cuando se considera que no es preciso crear una imagen: siempre y en todo momento se tiene una, incluso siendo la de empresa que no se interesa por su imagen.
El instante clave, para crear la nueva imagen de la compañía es en el proceso de su creación, antes que salga en pos de clientes del servicio, mas cuando ya este definida la hoja de ruta. No es preciso que sea perfecta, se puede prosperar más tarde; mas sí ha de ser profesional y adecuada a la compañía.
La empresa se ha estabilizado
Cuando se crea una empresa nueva, debemos ajustar los planes a la realidad del mercado. No es posible saber anticipadamente, cuál va a ser la actividad que va a estar realizando al cabo de cierto tiempo. Cuando esto ocurra, debemos renovar la imagen puesto que la compañía se halla estabilizada y se conoce qué hace realmente.
Por poner un ejemplo, una compañía que en su comienzo trata sobre administración de créditos al consumo, puede acabar siendo especialista en hipotecas. O bien una compañía de comidas preparadas, puede finalizar siendo un caterings.
Pésimo diseño
En ciertas empresas, el logo es, sencillamente malo. Esta desarrollado por alguien que no es un profesional, alguien con algún conocimiento o bien aun lo ha dibujado el propio empresario. El mal diseño, es verdaderamente lo peor: una mala imagen llega a la vista bastante más que una normal; los clientes del servicio vacilan de su profesionalidad y probablemente habría que entregar un mejor costo para lograr los pedidos.
Una buena imagen transmite confianza a los clientes del servicio, diferencia a la compañía de la competencia, hace que sea mejor recordada, y le puede permitir cobrar más por sus productos y servicios.
Debes pasar página lo antes posible, tienes que renovar tu imagen, tu negocio te lo agradecerá.
Que debemos tener en consideración para renovar los carteles lumínicos
Los carteles luminosos son utilizados para llamar la atención, debemos renovar los carteles por otros que tengan gracia y que comuniquen mensajes y conmuevas. Pueden ser de diferentes formas, modernos, pacíficos, beligerantes, etcétera En la confección de un cartel, se debe compensar entre el sentido del mismo y la tipografía con la que se ha escrito. Una buena combinación que pueda expresar y evocar las conmuevas, sentimientos, etcétera son los carteles con la variación de diferentes tamaños, pesos y anchos.
Al substituir un cartel, debemos meditar en el aspecto más esencial de la tipografía, al público al que se dirige el cartel y que sea capaz de leerlo con perfección, sin inconveniente.
Un género de letra para el texto: El llamado género de letra estándar , es más inteligible que cualquier otro de tipo ornamental. El espacio entre letras o bien palabras no ha de ser ni muy amplio, ni muy reducido, a fin de que tengan una buena visibilidad y legibilidad.
Como impacta el color: Recordaremos que los colores pueden ser de dos grupos: colores fríos y cálidos. Los colores cálidos están desde el colorado al amarillo, y son colores con mucho impacto, puesto que resaltan bastante sobre un fondo. El colorado o bien el naranja, son colores muy alegres y atractivos, por esto se usa el color colorado en los semáforos y señales de riesgo. Los colores fríos, son los verdes hasta los azules, se identifican por ser realmente relajantes. Se utilizan en la decoración infantil, lugares de estudio, centros de salud.
El blanco, gris y negro, no pueden pertenecer a los conjuntos cálidos y fríos. Los tonos cobrizos, cremas y amarillentos, son la nostalgia y también ideales para los productos naturales y tradicionales.